El pasado 18 de abril, a las 20:15 hora del Centro (2:15 UTC), se registró un sismo en Las Choapas con una magnitud de 4.1 y una profundidad de 184.1 kilómetros.
Según información preliminar del Servicio Sismológico Nacional (SSN), el epicentro del temblor se localizó a 76 kilómetros al sur de la Ciudad de Veracruz.
Ante la actividad sísmica, el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) sugiere no dejarse llevar por rumores o noticias falsas, recomendando obtener información solo de fuentes oficiales, como las autoridades de protección civil.
Tras un terremoto, se aconseja revisar tu hogar en busca de posibles daños. Utiliza tu celular únicamente para emergencias y evita encender velas o apagadores hasta asegurarte de que no haya fugas de gas.
Durante un sismo, es fundamental mantener la calma y trasladarse a una zona segura, manteniendo distancia de objetos que puedan caer. Si te encuentras en un automóvil, detente y aléjate de edificios, árboles y postes. En caso de estar en la costa, dirígete a zonas elevadas lejos de la playa.
México es un país con actividad sísmica constante. Ejemplos de esto son los sismos de 1985 y 2017, que causaron severos estragos a pesar de no ser los más violentos en la historia del país.
El terremoto más poderoso registrado en México tuvo lugar el 28 de marzo de 1787, cuando Oaxaca, entonces parte de la colonia española, experimentó un movimiento de 8.6 en la escala de Richter. Estudios realizados en 2009 estiman que otros grandes sismos, de similar magnitud, podrían ocurrir en el futuro, sobre todo en las costas de México y Centroamérica.