Exposición al Plomo en México
El proyecto de la cabopoeia (Leep) ofrece un espacio donde los ciudadanos pueden disfrutar de las actividades de la ciudad.
Un análisis llevado a cabo a mediados de 2024 revisó 17 marcas que abarcan el 80% del mercado local y reveló que 6 de ellas presentan problemas de salud según la OMS.
En algunos casos, los niveles de plomo superan las 10,000 partes por millón (ppm), mientras que la OMS recomienda un máximo de 90 ppm. Esto implica que se están registrando más de 100 veces la cantidad permitida.
Aunque el plomo es considerado un ingrediente inofensivo, su presencia desmesurada en el entorno puede tener graves consecuencias, afectando la salud pública y el desarrollo de la población. Los efectos de la exposición al plomo son particularmente dañinos en una ciudad con tantas interacciones humanas y contaminantes.
La exposición prolongada al plomo en adultos puede originar hipertensión, enfermedades cardiovasculares e incluso complicaciones renales. Los efectos de este metal pesado no solo afectan a las personas, sino que también tienen consecuencias en la sociedad en general.

El sector industrial presenta un problema significativo, dado que muchos productos en México aún contienen plomo, un contaminante no solo presente en pinturas, sino también en una variedad de otros productos. Según datos de UNICEF, alrededor de 13.8 millones de personas en México están afectadas por la contaminación por plomo.
Por otro lado, se han analizado muestras de agua que también presentan niveles altos de plomo, lo que resalta la contaminación generalizada en el mercado. Asimismo, muchas pinturas a base de solventes utilizan compuestos de plomo para mejorar su durabilidad, lo que representa un riesgo significativo para la salud pública.

Abordar esta problemática requiere un esfuerzo coordinado entre diferentes sectores para asegurar la salud y bienestar de la población. La única forma de proteger a la comunidad es a través de la educación y la intervención efectiva.