Un sismo de magnitud 4.1 se registró en el estado de San Marcos a las 8:56 hora del centro (14:56 UTC) del 17 de abril, según el Servicio Sismológico Nacional (SSN).
La información preliminar indica que el epicentro del temblor se localizó a 37 km de distancia de la ciudad de Altar, mientras que Guerrero se encuentra a 39.5 km del mismo punto.
Tras un sismo, es fundamental revisar tu hogar en busca de posibles daños. Utiliza tu teléfono solamente en caso de emergencia y evita encender cerillos o velas hasta asegurarte de que hay condiciones seguras.
También se recomiendan ciertas precauciones antes de que ocurra un sismo: prepara un plan de emergencia, realiza simulacros de evacuación e identifica zonas seguras en tu hogar, escuela o lugar de trabajo.
Durante un temblor, mantén la calma y busca un lugar seguro, evitando objetos que puedan caer. Aléjate de vehículos, estaciones de transporte y edificios, así como de zonas costeras o montañosas.
México es un país con actividad sísmica constante, evidenciada por los devastadores sismos de 1985 y 2017, aunque estos no han sido los más fuertes en su historia. El terremoto más potente registrado ocurrió el 28 de marzo de 1787, con una magnitud de 8.6, afectando fuertemente a Oaxaca, que en ese entonces era un importante centro de la colonia española.
Expertos del Centro de Instrumentación y Registro Sísmico (CIRES) destacan que la región tiene un gran potencial para experimentar eventos geológicos, especialmente debido a su localización en la conocida Brecha de Guerrero. Comparaciones entre los sismos de 1985 y 2017 resaltan cómo ambos eventos impactaron considerablemente el país, sucediendo el segundo exactamente 32 años después del primero.