Los conflictos entre provincias en el mundo son inevitables, así como las disputas dentro de un país. El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado que esta política externa podría resultar desastrosa para los principales activos financieros. Economistas cautelosos previenen sobre las consecuencias adversas que esta situación puede generar tanto para las empresas como para los consumidores en México.
“Actualmente, la situación es muy complicada para todos. La guerra comercial tiene un impacto, y la economía de México se ve amenazada”, explica un analista para la revista Espejo.
La familia empresarial enfrenta tiempos difíciles, donde las decisiones sobre comercio se vuelven cruciales. En respuesta, China ha implementado un aumento simétrico en los aranceles sobre los productos estadounidenses. Desde entonces, la guerra comercial ha ido en aumento, suscitando preocupaciones sobre una posible recesión global.
El impacto de la guerra comercial en la economía familiar
Según el Dr. Jorge Figueroa Erenes, académico de la UAS, las implicaciones de la guerra comercial son alarmantes.
“México podría verse afectado, ya que la inestabilidad comercial podría provocar una reducción en la actividad económica, resultando en menos inversión y menor empleo. El sector exportador podría ser uno de los más perjudicados”, advierte.
Asimismo, destaca que una desaceleración económica en Estados Unidos impactaría negativamente en los empleos de mexicanos que laboran allí, lo que disminuiría sus ingresos y aumentaría la inflación en México; esto reduciría la capacidad de envío de remesas a su país. Figueroa enfatiza que las remesas son una fuente vital de divisas para México.
Cristina Ibarra también menciona que la política comercial adoptada por Estados Unidos ha alterado las expectativas del gobierno mexicano, que aspiraba a atraer una gran inversión extranjera y ha desafiado su modelo económico. La incertidumbre fruto de esta guerra comercial ha puesto en jaque a la economía mexicana, ya afectada por la desaceleración post-pandemia. “No sabemos cómo se verá el mañana”, dice.
¿Debería México implementar aranceles en respuesta?
La situación actual lleva a reflexionar sobre la posibilidad de que México tome medidas arancelarias.
“El libre comercio ha sido una fuente importante para el desarrollo, fortaleciendo economías como la nuestra. Por ejemplo, producimos tomates. Contamos con una economía que no solo aprovecha recursos y mano de obra, sino también tecnología y productos que antes no se lograban producir aquí”, apunta un economista.
Coloca como ejemplo los productos tecnológicos, como computadoras, en cuya manufactura México tiene el potencial de competir, aunque aún no se ha presentado de manera efectiva. “Esta guerra se convierte en un ciclo de deterioro”, concluye la economista.
Adicionalmente, se observa que otras naciones, como Francia y China, han reaccionado a las tarifas impuestas por Estados Unidos con estrategias orientadas a ‘golpear’ en lugar de colaborar.
Posibles oportunidades para México derivadas de la guerra comercial
Durante el primer mandato de Trump, la guerra comercial comenzó a tomar fuerza, así como el embargo propuesto contra productos de Estados Unidos.
Esto podría significar que México, en respuesta a la imposición de aranceles de Estados Unidos, puede consolidarse como un socio comercial principal, continuando su beneficio del Tratado Comercial Regional.
Sin embargo, esta situación podría beneficiar a ciertos consumidores al ofrecer productos más baratos, aunque también presentaría riesgos para los productores locales, lo que podría afectar los empleos y los niveles salariales en el país.
Cronología de la guerra comercial entre China y Estados Unidos
Las tensiones se intensificaron después de febrero, y en marzo Estados Unidos impuso aranceles del 20%. En respuesta, China optó por aumentar sus tarifas en un 15%.
El 2 de abril se implementó el llamado “Día de la Liberación” por Donald Trump, donde se anunciaron nuevas medidas contra diferentes productos, fijando aranceles del mismo porcentaje. A lo largo de esa semana, la sanción alcanzaría el 84%.
Finalmente, esta semana, los mercados continúan enfrentando desafíos, mientras que los funcionarios de ambas naciones han expresado su determinación de prolongar esta disputa hasta sus últimas consecuencias.