El Instituto de Derechos Humanos en México ha presentado un informe que destaca un “retroceso” en el acceso a la información y la protección de datos personales, señalando cómo el estado mexicano se enfrenta a múltiples barreras que afectan a los derechos humanos.
El documento titulado “Barreras Informáticas: De Sabios Paradigmas a Explotación del Acceso a la Información” aborda la importancia de las voces, incluso de los silencios, que continúan comunicándose a pesar de los retrocesos en la institucionalidad.
Principales Barreras
Los documentos en esta área están sujetos a cambios y su desarrollo es fundamental para comprender la situación actual.
“Elementos clave para la institución de la nación están en juego.”
— Leopold Maldonado.
La primera barrera se refiere a la falta de un marco adecuado para el Instituto Nacional de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), que se señala como crítico para el funcionamiento del sistema de transparencia.
La segunda barrera está relacionada con la digitalización y la vigilancia del estado, ya que, aunque hay un intento de modernizarse, los marcos de transparencia y salvaguardas son insuficientes, especialmente en lo que respecta a la privacidad y protección de datos personales.
“Los seres humanos están destinados a ser parte de diversos sectores.”
La tercera barrera se refiere a la violencia contra la prensa, que ha ido en aumento, incluyendo el acoso y la impunidad ante los delitos cometidos contra periodistas durante la administración de Andrés Manuel López Obrador (2018-2024).
“En México, la represión se manifiesta a través de amenazas y campañas de desprestigio.”
La cuarta barrera enfatiza la transición hacia el olvido y la falta de reconocimiento oficial de eventos como la masacre estudiantil de octubre de 1968, lo que resalta la ausencia de responsabilidad por parte del estado en casos de desapariciones forzadas y violencia sistemática.
“Hoy, más de 124 mil personas están desaparecidas en México.”
Finalmente, la quinta barrera es la incertidumbre institucional, ya que las entidades encargadas de proteger y garantizar los derechos humanos han sido debilitadas sistemáticamente desde el siglo pasado.
Para recuperar la confianza, es necesario realizar reformas profundas y un compromiso auténtico para garantizar y proteger los derechos humanos, lo cual exige, en esencia, voluntad política.
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, tiene la oportunidad histórica de corregir los errores de su predecesor y gobernar con verdad, así como de construir instrumentos efectivos que protejan los derechos de los ciudadanos.
“Hacemos un llamado respetuoso pero firme para construir un futuro mejor a partir del diálogo crítico y colaborativo con la sociedad civil mexicana.”
— Claudia Sheinbaum.
Foto de efe.