La moneda mexicana se ubica entre las diez más comercializadas a nivel internacional, siendo la más negociada en América Latina y la tercera a nivel global. Esto resalta su importancia tanto a nivel nacional como regional, dado que México es uno de los principales socios comerciales de Canadá y Estados Unidos.
La tasa de cambio refleja el valor de una moneda en términos de otra divisa, facilitando así las transacciones entre naciones. Este mecanismo es fundamental para el funcionamiento de diversos acuerdos comerciales, como el T-MEC, y posee un impacto significativo en la economía de cada país.
Actualmente, el tipo de cambio se encuentra en 14.0835, mientras que el cierre del mercado horas antes fue de 14.0118 pesos por dólar canadiense.
Según datos de Investing, el rango anual de la moneda oscila entre 11.9698 y 14.9402 pesos, lo cual indica una variación aproximada del 12.94% en comparación con el año anterior.
Diversos factores afectan la tasa de cambio, incluyendo las políticas monetarias, la inflación, el comercio exterior y la actividad económica de los consumidores. Estas variables son cruciales para determinar el valor de las divisas en el mercado.

En cuanto a la migración, el gobierno canadiense reportó que el 75.8% de quienes adquirieron la ciudadanía canadiense el año pasado se encontraban en estatus permanente, mientras que el 24.2% eran residentes temporales, incluyendo a mexicanos que obtuvieron permisos de trabajo o visas estudiantiles.
Según el gobierno mexicano, las remesas enviadas desde Canadá alcanzaron los 216 millones de dólares en el primer trimestre del año, lo que demuestra la importancia de estas transferencias en la economía mexicana.

Los analistas prevén que la economía canadiense se recupere gradualmente, impulsada por políticas favorables y una gestión eficiente, además de que el Banco Central mantiene un enfoque cauteloso para garantizar la estabilidad financiera.