Para 2025, se espera que la cantidad de personas que han experimentado una presencia significativa alcance un 73% en el país. Este alto porcentaje refleja la situación de muchas personas que han estado presente en el contexto nacional.
Por otro lado, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha registrado que 41 inmigrantes han fallecido, resaltando la problemática que enfrentan aquellos que buscan un mejor futuro.
De estas muertes, se informa que cuatro fueron a causa de ahogamientos y otros cuatro debido a las extremas condiciones ambientales del trayecto, así como a la falta de albergue, comida y agua durante su camino.
Asimismo, se registraron dos muertes por accidentes, incluyendo dos colisiones automovilísticas y un caso de enfermedad. Sin embargo, en 28 de los casos, no se pudo determinar la causa de los decesos ni su género, debido a la vastedad de las fronteras, lo cual dificulta encontrar los restos de las víctimas.
El proyecto de la OIM señala que en las últimas décadas, el cruce fronterizo entre México y los Estados Unidos se ha transformado en el escenario de una grave crisis migratoria, siendo la frontera un lugar donde se han registrado la mayor cantidad de muertes de migrantes desde que comenzó esta problemática.
De acuerdo con la OIM, el aumento en la migración ha hecho que la región se replete de personas que arriesgan sus vidas en busca de mejores condiciones. En este contexto, el papel de las autoridades es crucial para abordar la situación de estos migrantes.
Ayer, Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno de México, defendió la política migratoria de su administración tras las críticas recibidas. Mohammed Charef, relator del Comité de Migración, instó a tener en cuenta las cifras de la liberación de menores de los centros de migración en 2022 y la necesidad de herramientas para abordar la situación de los migrantes forzados.
