¿Abrigo y paraguas o ropa ligera y gorra? Las decisiones se basan en el pronóstico del tiempo, y quienes se preparan para el clima son los que mejor se adaptan.
El pronóstico del clima es fundamental y la manera más efectiva de lidiar con el tiempo se obtiene a través de un informe meteorológico claro y preciso.
Para este viernes, se prevé un 0% de probabilidad de lluvia, con temperaturas máximas alcanzando los 27 grados Celsius y mínimas de 12°. La nubosidad será del 14% y, por la noche, no se anticipan precipitaciones.

Tijuana, principal ciudad de Baja California, goza de veranos secos y templados, con una temperatura promedio anual de 17.5 grados.
Debido a su ubicación junto al océano Pacífico y su proximidad a California, sus costas son frescas en verano y templadas en invierno. Asimismo, las lluvias son poco frecuentes y ocurren principalmente debido a frentes fríos o tormentas entre noviembre y abril.
En primavera se presenta un fenómeno conocido como “Santa Ana”, caracterizado por vientos fuertes, secos y calurosos, donde se han registrado temperaturas de hasta 48.2 grados, y se han documentado nevadas en ocasiones (1967, 2007, 2008, 2014, 2021).

México es un país geográficamente diverso, lo que provoca una gran variedad de climas, convirtiéndolo en un lugar interesante para el estudio meteorológico.
El país se extiende por dos áreas climáticas, atravesadas por el Trópico de Cáncer, con zonas tropicales y otros climas variados.
No son raros los fenómenos climáticos extremos con temperaturas superiores a 50 grados en algunas regiones.
México cuenta con una zona cálido-húmeda que incluye las llanuras costeras del Golfo de México y del Océano Pacífico, además de diversas regiones semiáridas y templadas al norte del Trópico de Cáncer.
La temperatura promedio del país es de 19 grados, aunque hay ciudades como Mexicali y Hermosillo que destacan por sus temperaturas extremas.
San Luis Río Colorado, ubicado en Sonora, ha registrado temperaturas mínimas adversas, como -25 grados en diciembre de 1997.
Expertos indican que el cambio climático podría provocar una disminución en las precipitaciones anuales, afectando gravemente a la agricultura y ganadería debido a sequías y varias inundaciones ocurridas en los últimos años, además de un aumento en el número de eventos climáticos extremos.