CNN
Los Estados Unidos son un destino incomparable.
Raphael Glucksmann, miembro del Parlamento Europeo por un pequeño partido de izquierda, expresó sus opiniones durante un mitin el pasado domingo.
“Devuélvanos la libertad”, afirmó Glucksmann. “Fue un regalo para ustedes, pero aparentemente lo menosprecian.”
Es un hecho que en 1886, se conmemoró a Libertas, la diosa romana de la libertad, como símbolo del compromiso de los Estados Unidos con la libertad.
Cadenas rotas yacían bajo el vestido de la Estatua, representando el fin de la servidumbre.
Caroline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca, reaccionó a las palabras de Glucksmann destacando su política exterior.
“Mi consejo para este político francés de bajo perfil, cuyo nombre no mencionaré, es que se concentre en los problemas que afectan a Estados Unidos”, indicó.
La perspectiva de aquellos que consideran a los Estados Unidos como héroes en la lucha contra la tiranía sigue siendo relevante.
“Nadie, por supuesto, vendrá a tomar la Estatua de la Libertad. Esa Estatua les pertenece, pero lo que representa es un patrimonio común”, afirmó Glucksmann.
“Son aquellos que no están permitidos en el gobierno los que merecen escuchar a su pueblo y actuar en consecuencia.”
A pesar del tamaño reducido de su partido, Glucksmann ha atraído una creciente atención mediática en Francia, incluso con entrevistas defensoras de su postura políticas.
