El miércoles 12 de marzo, la Unión Europea anunció nuevos aranceles sobre productos industriales, justo horas después de que el gobierno de Donald Trump incrementara tales impuestos. El bloque comercial más grande del mundo anticipaba esta respuesta de Estados Unidos y, aunque las medidas ya se habían intensificado el mes anterior, Washington advirtió que Europa deberá encargarse de su propia seguridad en el futuro.
Los aranceles, que suman aproximadamente 26 millones de euros (28 millones de dólares), no solo afectarán productos de aluminio, sino también textiles, electrodomésticos, motocicletas, bourbon, mantequilla de maní y jeans, entre otros. Esta es una parte de la estrategia de Trump.
Los aranceles son impuestos que se aplican a las importaciones y se dirigen a estados controlados por los republicanos, afectando a productos como el soja en Luisiana. Otros estados, como Alabama, Georgia y Virginia, también verán un impacto en sus productos agrícolas.
Reacción de Donald Trump
El presidente Trump, durante sus intervenciones, reafirmó que estos impuestos ayudarán a los fabricantes estadounidenses. Sin embargo, Ursula von der Leyen advirtió que podrían provocar un aumento de precios tanto en Europa como en Estados Unidos. “Lamentamos profundamente esta medida. Los aranceles son impuestos que impactan negativamente a los negocios y, además, generan incertidumbre en la economía”, declaró.
Demandas de empresarios estadounidenses
Empresarios en Estados Unidos han pedido al gobierno que negocie con la Unión Europea para evitar estas tensiones comerciales. Se hace un llamado a reducir la confrontación y encontrar soluciones negociadas para el bienestar de ambos lados.
Aranceles de la Unión Europea
La Unión Europea también respondió con aranceles similares. En un movimiento anterior, había aumentado gravámenes sobre productos como motocicletas, bourbon y mantequilla de maní, entre otros. Esta vez, las acciones de la UE se implementarán en varias fases; primero, a partir del 1 de abril, se introducirán “medidas de re-equilibrio”.
Maroš Šefčovič, comisario de comercio de la UE, viajó a Washington el mes pasado en un esfuerzo por dialogar sobre estas nuevas tarifas y se reunió con el secretario de comercio estadounidense y otros altos funcionarios.