Impacto en Sectores Laborales de EE.UU.
Ciudad de México, 9 de marzo (Sinembargo). – Marran Rebecca Davis O’Brien y Miriam Jordan desde Nueva Jersey reportan que, cada mañana, los trabajadores de origen latino y muchos de ellos indocumentados, abordaban los trenes en el centro de Freehold, Nueva Jersey, siendo contratados por empresas locales.
“En las últimas semanas, las vías han estado vacías”, comentan las periodistas de The New York Times. “Con el actual presidente (Donald Trump), existe temor”, dice Mario, un hombre de 55 años. “La única manera de hacer esto es ayudar a entender la situación y ser honesto sobre los riesgos”. Su hijo también vive en Estados Unidos de manera ilegal; uno trabaja en la pavimentación, mientras que el destino de su otro hijo es incierto.
Este ambiente de tensión ha conducido a la desolación en diversas áreas. Trump ha lanzado planes para efectuar una “deportación masiva” y en esas primeras semanas de su mandato, ya se llevaron a cabo operaciones de control migratorio en ciudades por todo EE.UU. Esto ha generado una disminución notable en la comunicación entre inmigrantes, según relatan Davis y Jordan.
“El miedo se ha apoderado de los trabajadores indocumentados en Estados Unidos. Muchos prefieren quedarse en casa. El impacto se siente no solo en los hogares de las comunidades inmigrantes, sino también en industrias que dependen de su mano de obra barata como la construcción, alentando una crisis que afectará a los consumidores pronto.” Se estima que el 20% de la fuerza laboral estadounidense está compuesta por inmigrantes.
Cientos de miles de personas, que antes estaban protegidas contra la deportación bajo programas laborales, ahora enfrentan incertidumbre. Trump ya ha anunciado la intención de eliminar gradualmente estos programas, comenzando con beneficiarios de Venezuela y Haití, lo que también ha causado preocupación en las comunidades afectadas, dice el artículo de The New York Times.
Al mismo tiempo, la preocupación constante crece en sectores que representan la industria estadounidense. El pasado mes, la ONU invitó a analizar la situación legal de muchos migrantes, mientras continúan enfrentando diferentes amenazas. La incertidumbre y el miedo han permeado en los sectores donde operan y viven, generando un ecosistema laboral inestable que podría desencadenar consecuencias de gran impacto para consumidores y empresas.
Justo al norte, en Canadá, Jacob Kirky menciona que una gran fábrica de acero en Lorain, Ohio, que había sido un símbolo de renacimiento en el pasado, ahora muestra signos de abandono. A pesar de que Trump prometió revitalizar la industria del acero, la realidad es que la fábrica ha permanecido cerrada y el impacto de los aranceles ha sido notable. Esta situación refleja la desilusión de muchos en el sector manufacturero, evidenciando que las promesas de Trump no se han cumplido como se esperaba.