En la Ciudad de México, el 8 de marzo, la presidenta Claudia Sheinbaum se pronunció en contra de la violencia hacia las mujeres y anunció diez acciones para reivindicar sus derechos. Durante su discurso en el Palacio Nacional, resaltó la importancia de estas medidas en el contexto del Día Internacional de la Mujer.
Sheinbaum enfatizó que es imperativo erradicar la violencia contra las mujeres en México. “No más feminicidios, ni un golpe más, ni una palabra violenta más”, manifestó, dejando claro que las mujeres tienen el derecho a una vida plena y libre, y que su gobierno está comprometido a asegurar esas garantías.
Además, la presidenta mencionó el inicio de 24 efemérides para restaurar las garantías fundamentales, lo cual incluye un programa para proporcionar pensiones a quienes desempeñan labores en el hogar y el reconocimiento de derechos agrarios para aproximadamente 150 mil mujeres.
Durante su intervención, Sheinbaum también hizo hincapié en la construcción de al menos 200 obras y el reconocimiento de las comunidades indígenas afromexicanas a lo largo de su administración. Resaltó que la importancia de estos esfuerzos no se limita a declaraciones, sino que deben traducirse en acciones concretas que impacten el bienestar de todos.
Un punto crucial de su mensaje fue la necesidad de abordar el pasado para transformar las injusticias actuales, así como luchar contra el racismo y el clasismo presentes en la sociedad. “La transformación debe ser desde la raíz”, afirmó ante mujeres indígenas, afrodescendientes y empresarias de diferentes sectores.
En el evento, la mandataria subrayó que su gobierno defiende los derechos de todos, pero advirtió que históricamente las mujeres han sido tratadas de manera desigual. Denunció que “el conservadurismo considera que los derechos son mercancías y privilegios, lo cual condena a las mujeres a la desigualdad.”