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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha convocado a una reunión con su gabinete para abordar los esfuerzos de Elon Musk destinados a reducir el gasto gubernamental y personal.
Los debates en el encuentro fueron intensos, según varios medios locales. Musk criticó al secretario de Estado, Marco Rubio, por no despedir al número adecuado de empleados, según reportes del New York Times.
De acuerdo con el diario, Musk le mencionó a Rubio que su desempeño “en televisión” era bueno, aunque se abstuvo de hacer comentarios favorables sobre su trabajo como secretario de Relaciones Exteriores.
Se indicó que el multimillonario también intercambió palabras con el secretario de Transporte, Sean Duffy, sobre la escasez de personal en la administración de aviación que afecta a su equipo.
Ambas partes admitieron que discutieron acaloradamente, pero siguen comprometidos con el objetivo de mantener un diálogo productivo. La Casa Blanca no ha respondido a las solicitudes de comentarios realizadas por la BBC.
Cambio de dirección
Trump habló sobre los desafíos a los que se enfrentan al abordar la situación actual y cómo van a necesitar medidas adecuadas. “Debemos usar un bisturí, no un hacha”, expresó, enfatizando la necesidad de un enfoque más cuidadoso.
Recientemente, Musk utilizó una motosierra en un evento político, lo cual enfureció a algunos demócratas y a varios funcionarios. Además, el equipo de Musk ha enviado múltiples correos electrónicos desde una cuenta oficial del gobierno, lo que ha generado más controversia.
Los jueces federales han expresado su preocupación por la influencia que Musk puede tener en diversos casos legales. Esta preocupación se ha intensificado tras las declaraciones de Trump durante su intervención en el congreso.
Hasta ahora, Musk y Trump parecen haber formado una alianza poderosa, dado que Musk es el hombre más rico del mundo y Trump es considerado uno de los políticos más influyentes de Estados Unidos.
En un gesto que refleja su relación, El viernes pasado, Musk fue visto abordando el Air Force One, el avión presidencial, para dirigirse a Mar-a-Lago, en Florida.