El presidente Donald Trump expresó su condena este sábado ante el “atroz” ataque en el que dos congresistas demócratas fueron baleados por un individuo que se hacía pasar por policía en Minnesota.
La representante Melissa Hortman y su cónyuge perdieron la vida, mientras que el senador John Hoffman y su pareja se encuentran en estado crítico.
Los asaltos ocurrieron de manera separada en las residencias de los legisladores estadounidenses.
“Este tipo de violencia inaceptable no será tolerada en los Estados Unidos de América”, declaró Trump en un mensaje publicado a través de la cuenta en X (anteriormente Twitter) de Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca, y posteriormente difundido por la cuenta oficial del gobierno.
El presidente mencionó que el FBI, la fiscal general Pam Bondi y otros funcionarios están liderando las investigaciones, y que cualquier persona implicada será llevada ante la justicia con todo el rigor de la ley.
“¡Dios bendiga al magnífico pueblo de Minnesota, un lugar verdaderamente excepcional!”, concluyó el mandatario en su comunicado oficial tras recibir la noticia del tiroteo que impactó a Minneapolis en la mañana del sábado.
Por otro lado, el gobernador de Minnesota, Tim Walz, confirmó el fallecimiento de Hortman, quien era presidenta de la Cámara de Representantes estatal, junto a su esposo. ABC News reportó que la pareja restante, compuesta por Hoffman y su esposa, sigue hospitalizada en estado crítico.
Según la portavoz del Departamento de Seguridad Pública de Minnesota, los disparos se produjeron entre las 2:00 y las 3:35 de la mañana, y las evidencias recabadas indican que los atacantes conocían la identidad de los legisladores. “No fue un acto al azar”, explicó una fuente oficial a ABC News. “Parecía que sabían exactamente a quién esperaban”.