Nueva York. Ayer se cumplieron los primeros 100 días del segundo mandato de Donald Trump, quien ha centrado su presidencia en cuestiones relacionadas con la economía, el comercio y la industria.
Durante estos 100 días, Trump se ha enfrentado a numerosos desafíos, informando sobre la evolución de su administración y sus políticas liberales.
El mandatario celebró sus primeros 100 días en un evento en Michigan, donde abordó temas como la inmigración indocumentada y la reducción de la violencia, buscando mejorar la situación en el país.
Su gobierno se ha caracterizado por una constante emisión de órdenes ejecutivas, que han incluido medidas antimigrantes y el despliegue de militares en la frontera, además de la reducción de programas y agencias federales en salud, educación y asistencia exterior.
Los críticos sostienen que estas acciones son destructivas y han intensificado el miedo en la población, sin que la administración haya logrado poner fin al conflicto en Ucrania o cumplir con otras promesas inmediatas.
A pesar de los esfuerzos realizados, muchos economistas advierten sobre la creciente posibilidad de una recesión económica, lo que podría complicar aún más la situación del país ante la competencia entre consumidores y empresas.
Por todo lo anterior, los logros y celebraciones de Trump son objeto de cuestionamientos, ya que su nivel de aprobación es de apenas el 39%, el más bajo registrado en sus primeros 100 días en décadas, lo que refleja una percepción negativa ante su estilo de gobernar y su manejo de temas cruciales.
