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Panamá está en el centro de un importante acuerdo comercial que ha sido impulsado por el presidente de Estados Unidos. Este acuerdo ha generado preocupaciones sobre la influencia de China en el control del Canal de Panamá, que ha estado en manos panameñas desde 1999.
La reciente amenaza de Donald Trump al gobierno panameño para recuperar el control del canal ha generado tensiones. Los dos grandes puertos involucrados en este contexto son gestionados por empresas que están conectadas a esta situación internacional.
BlackRock, la mayor firma de inversiones del mundo, junto con su división Global Infrastructure Partners, ha adquirido acciones mayoritarias de CK Hutchison, una empresa que opera puertos clave en Panamá, por un valor aproximado de 19 mil millones de dólares.
Este acuerdo podría ayudar a mitigar las preocupaciones sobre China y su influencia en el canal, según expertos en el tema. A medida que se avanza en la ejecución del contrato, se espera que se cuente con cada vez más interés de otras partes involucradas.
El canal de Panamá no solo es estratégico para el comercio internacional, sino que también representa un punto crucial para el control y la dominancia en áreas geográficas clave. Desde su construcción en 1914, el canal ha sido un elemento significativo en las relaciones comerciales y políticas globales.
BlackRock, fundado en 1988, se ha convertido en una de las gestoras de inversión más importantes del mundo, manejando activos por valor de billones de dólares. Aunque ha enfrentado críticas, la empresa sigue siendo influyente en decisiones de inversión que impactan a diversos sectores, incluida la infraestructura.
