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El Papa Francisco experimentó dos episodios de “insuficiencia respiratoria aguda” el pasado lunes por la tarde, según informes del Vaticano.
Los médicos debieron intervenir para conectar al pontífice a un respirador, dado el incidente que lo obligó a ser hospitalizado, según el último comunicado de la Santa Sede, que también alertó sobre su estado.
Francisco, de 88 años, se encuentra actualmente “alerta, consciente y colaborativo”, según el Vaticano.
El día 18 de su hospitalización, el Papa había sufrido un episodio que causó vómitos, según el comunicado oficial.
Las autoridades mencionaron que el Papa había sido tratado inicialmente con oxígeno terapéutico y el domingo ya no requería “ventilación mecánica invasiva, solo oxigenoterapia de alto flujo”. Sin embargo, tras los episodios del lunes, el Papa ha vuelto a necesitar ventilación mecánica.
La situación médica del pontífice ha generado preocupación y varios cientos de católicos se han reunido en la Plaza de San Pedro en el Vaticano durante ocho noches consecutivas, rezando por su salud. Muchos asistentes llevaban rosarios mientras se dirigían hacia la Basílica.
“Vengo todas las noches a rezar”
La multitud, compuesta por fieles, sacerdotes y peregrinos católicos, estaba encabezada por un cardenal estadounidense.
“Vengo todas las noches a rezar, pero esta noche estoy bastante preocupado”, expresó Javier, un sacerdote rumano, reflejando los sentimientos de muchos de los presentes en la plaza. “Todavía tenemos esperanzas, pero no pinta bien”, añadió.
Patricia, una católica de Toledo, España, compartió su preocupación: “Tiene mala pinta, y es una pena porque nos gusta mucho Francisco”. Ella se unió a las oraciones, acompañada por su pequeña hija.
Los católicos también han estado visitando el Hospital Gemelli en Roma en espera de un vistazo al Papa, con la esperanza de que se asome por la ventana, como lo hizo en el pasado.
Las autoridades informaron que el Papa fue tratado por bronquitis antes de ser diagnosticado con neumonía en ambos pulmones y que, debido a su sensibilidad, está expuesto a enfermedades respiratorias.
Con el desarrollo de los acontecimientos, se reitera que los fieles continúan orando, expresando su apoyo al Papa mientras se mantuvo su estado bajo vigilancia médica.