La inesperada propuesta del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha generado preocupación en Europa. Trump sugiere que si se retira el apoyo estadounidense, los aliados quedarían en una situación insostenible.
El Primer Ministro del Reino Unido, Keir Starmer, ha declarado que se necesitan medidas defensivas para fortalecer la posición del país ante posibles amenazas globales.
En Alemania, donde se llevan a cabo discusiones para conformar un nuevo gobierno, aún no se han establecido políticas concretas, y el debate sobre la posible reforma del tope militar sigue abierto.
Amenaza Desde El Este
Rafael Loss, experto en seguridad y defensa del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (ECFR), señala que la principal amenaza es el potencial de agresiones rusas hacia países europeos. El grupo de expertos Bruegel, con sede en Bruselas, también advierte sobre la posibilidad de un ataque ruso a una nación de la Unión Europea.
Bruegel destaca que, en caso de que Estados Unidos se retire de la OTAN, Europa tendría que fortalecer sus capacidades militares con “brigadas, barcos, aviones, entre otros”.
Además, la necesidad de adquirir el “hardware” militar es evidente, pero también es crucial desarrollar nuevas estrategias y capacidades operativas.
Financiamiento de la Guerra en Ucrania
El gobierno alemán, bajo la dirección del canciller Olaf Scholz, ha prometido una inversión de 100.000 millones de euros para aumentar el presupuesto militar. Sin embargo, las estimaciones indican que la Unión Europea necesitaría un aporte significativo para reemplazar el respaldo que proporciona Estados Unidos a Ucrania, cuyo total se sitúa en 42.000 millones de euros.
OTAN Sin EE.UU.: Un Costo Elevado
La salida de Estados Unidos de la OTAN implicaría costos mucho mayores para los países europeos. Es importante recordar que las capacidades militares de Alemania están por detrás de lo necesario y prometido, lo que ha generado una preocupación continua sobre la defensa continental.
La promesa de Alemania de contribuir con dos divisiones a la OTAN enfrenta dificultades debido a la falta de preparación adecuada.
Opciones de Financiamiento
De acuerdo con Jack Allen Reynolds, economista jefe para la eurozona en Capital Economics, sería posible movilizar hasta 250.000 millones de euros anuales a un costo del 3.5% del PIB. Este enfoque requiere un compromiso significativo de los gobiernos nacionales, según el experto.
Se sugiere la creación de bonos para proyectos de defensa que podrían fortalecer las capacidades militares a nivel europeo.
Desde una perspectiva macroeconómica, analistas de Bruegel sostienen que un incremento en el gasto en defensa financiado a través de deuda podría estimular la actividad económica en Europa. Asimismo, se espera que estos gastos también contribuyan positivamente al crecimiento económico.
Rafael Loss, del ECFR, coincide en que este enfoque es válido “hasta cierto punto”, pues la industria de defensa puede ser un motor para la economía.
(cp/ers)