Incautaciones y Operativo Federal
Las autoridades federales han llevado a cabo una serie de incautaciones, incluyendo cuatro barcazas cisterna con crudo, tres camiones cisterna comerciales, y un vehículo de la empresa Arroyo Terminals, en el marco de una investigación destinada a desmantelar una presunta red financiera que apoya al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG). Además, se busca confiscar tanques de almacenamiento de crudo y otros bienes raíces asociados a Arroyo Terminals en Rio Hondo. La operación ha culminado en cargos formales contra dos miembros de una familia de Texas del Sur, quienes presuntamente conspiraron para proveer apoyo material y lavar dinero para el cartel.
Acusaciones Contra los Jensen
El 22 de mayo se emitió un acta de acusación señalando a Maxwell Sterling Jensen, de 25 años, y a James Lael Jensen, de 68, como presuntos conspiradores en la entrega de fondos al CJNG, considerado un grupo terrorista extranjero por el Departamento de Estado de EE. UU. el 20 de febrero. Se alega que operaban Arroyo Terminals y facilitaron la entrada ilícita de aproximadamente 2.881 cargamentos de crudo, infringiendo la Ley de Aranceles.
Estrategia Federal en la Lucha Contra el Crimen
El fiscal federal Nicholas J. Ganjei enfatizó que el caso refleja el enfoque agresivo y pionero del Distrito Sur de Texas contra los cárteles de drogas. Este esfuerzo no se limita a los narcotraficantes, sino que también incluye a cómplices y facilitadores. Cualquier persona que proporcione recursos, ya sean bienes o dinero, será perseguida legalmente.
Consecuencias Financieras y Penales
Según la Fiscalía, los Jensen también están acusados de instigar el ingreso engañoso de crudo, generando millones de dólares en ingresos ilícitos. Se contempla que, en caso de condena, el gobierno estadounidense Busque recuperar 300 millones de dólares. Además, James Jensen enfrenta un cargo adicional por lavado de dinero que podría resultar en 10 años extra de prisión.
Colaboración Interagencial
La investigación es el resultado de la colaboración entre varias agencias, incluyendo el FBI, ICE-HSI, DEA, y el IRS CI, junto a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza y el Servicio de Alguaciles de EE. UU. El caso se enmarca en la Operación Liquid Death, parte de la iniciativa nacional Operation Take Back America, que utiliza todos los recursos del Departamento de Justicia para combatir el crimen organizado.
Implicaciones de la Designación del CJNG
La designación del CJNG como organización terrorista extranjera permite a las autoridades estadounidenses perseguir legalmente a quienes colaboran con el cartel en actividades financieras o logísticas. La acusación contra los Jensen es uno de los primeros casos que aplica esta designación en un contexto de tráfico de crudo y lavado de dinero a gran escala.
Investigaciones Futuras
Las autoridades continúan investigando para identificar otros posibles cómplices y desmantelar completamente la red de apoyo al CJNG. Este caso se destaca como un ejemplo emblemático de la nueva estrategia de las agencias estadounidenses, que busca no solo atacar a los operadores directos de los cárteles, sino también a quienes facilitan sus operaciones desde el sector empresarial y financiero.