El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha reducido sus proyecciones económicas para México, indicando un descenso en el Producto Interno Bruto (PIB) para 2025, lo que contrasta con otras estimaciones similares.
Esta modificación, según el FMI, es consecuencia del impacto de los aranceles impuestos por Estados Unidos durante el mandato de Donald Trump, en el contexto de la guerra comercial.
El pronóstico de la economía mexicana no solo viene del FMI, sino también de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Esta última estima un crecimiento del PIB de 1.3% para 2025, ofreciendo una proyección que también ha generado controversia.
No obstante, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, ha rebatido este pronóstico de manera contundente, afirmando que sus análisis económicos difieren de los del FMI y que se basan en diferentes modelos económicos.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum expresó que las proyecciones del FMI no coinciden con los análisis realizados por su equipo.
Aseguró que los modelos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, aunque han ajustado sus estimaciones de crecimiento, aún mantienen un panorama más favorable que el del FMI.
En este contexto, México ha sido identificado como una de las economías más vulnerables. Según datos del Banco Base, el 83% de las exportaciones mexicanas tienen como destino Estados Unidos, que representa el 26% del PIB del país. Esta alta dependencia comercial hace que la economía mexicana sea especialmente sensible a los cambios en las políticas comerciales de su principal socio.
A pesar de este escenario, Sheinbaum ha enfatizado que su gobierno está trabajando para mitigar los efectos de los aranceles y fortalecer la economía nacional. La presidenta destacó que su administración cuenta con un plan económico sólido, conocido como “Plan México”, que busca diversificar la economía y fomentar exportaciones hacia nuevos mercados.
El “Plan México”, presentado en enero, tiene como objetivo fortalecer las bases económicas del país y asegurar un crecimiento sostenible, revelando todos los proyectos de infraestructura del gobierno y programas específicos para impulsar la industria agrícola en México.
Estas acciones son vistas, según Sheinbaum, como parte de un esfuerzo integral para contrarrestar los efectos de las políticas comerciales de Trump y garantizar un crecimiento económico sólido.
“Así que tenemos un plan nacional para fortalecer la economía mexicana y no coincidimos con esta visión”, subrayó Sheinbaum, reafirmando el compromiso de su administración con un desarrollo sostenible.
