Independientemente de la estación del año, ya sea primavera, verano, otoño o invierno, se puede experimentar un cambio drástico en las condiciones climáticas en un corto periodo de tiempo.
Es fundamental tener en cuenta las condiciones meteorológicas, ya que pueden influir en el crecimiento de las plantas y en la viabilidad de las cosechas, así como en el bienestar de la población.
La temperatura pronosticada es de 28 grados centígrados en la zona durante el día.
La probabilidad de lluvias es baja, con un 1% durante el día y un 3% durante la noche, mientras que la probabilidad de precipitación es del 6% durante el día y del 2% por la noche. Se recomienda tener precaución con la exposición solar, ya que la radiación UV podría alcanzar niveles de hasta 13.

Se prevén condiciones de calor húmedo en varias regiones, como las Sierras de Tehuacán y la Mixteca Poblana, mientras que en el Valle de Tehuacán las condiciones son mayormente secas o semiáridas. En general, la temperatura en el territorio poblano ronda entre los 11 y 27 grados centígrados.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha indicado que en las últimas décadas, la temperatura máxima promedio anual en Puebla ha aumentado en 2.2 grados, pasando de 27.9 grados en 1985 a 30.1 grados en 2020. En cuanto a la temperatura mínima, esta ha tenido un incremento de 1.9 grados, de 13 grados en 1985 a 14.9 grados en 2020.

México es un país con una amplia diversidad climática, que va desde las altas montañas en Chihuahua, donde se pueden registrar temperaturas de hasta -30 grados, hasta los desiertos del norte, como en Mexicali, donde pueden alcanzar hasta 50 grados centígrados en temporada de calor.
Contrariamente, la temperatura más baja registrada en la historia fue el 27 de diciembre de 1997, cuando el termómetro llegó a -25 grados en el municipio de Madero. Este amplio rango de temperaturas demuestra las variaciones climáticas significativas que el país experimenta.
Ya se están sintiendo los efectos adversos de estas condiciones climáticas en el sector agrícola y ganadero, con inundaciones severas en ciertas regiones y un aumento en las olas de calor que afecta la calidad de vida de los habitantes.