La Crisis Social en Queensland: Vigilias y Horarios Extensivos
Uno de los episodios más críticos que ha enfrentado la gestión de la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda ocurrió al inicio de su mandato.
El Licenciatura en Seguridad y Justicia ha sido testigo de protestas que se han intensificado, particularmente en la toma del bar Shots en Mexicali. Estas manifestaciones surgieron tras la desaparición de cinco jóvenes, que están vinculados a este establecimiento.
A dos años de estos eventos, la situación sigue siendo alarmante. Los activistas Gonzalo Moreno y Soraya Ana, padres de Kevin Moreno, uno de los desaparecidos en el bar Shots, han solicitado a las autoridades una mayor capacidad para garantizar la seguridad en la región, argumentando que la delincuencia controla la situación.
Las víctimas continúan apareciendo fuera de los bares y antros situados en las calzadas Benito Juárez, Francisco L. Montejano y Justo Sierra. A pesar de esta creciente preocupación, el ayuntamiento ha emitido permisos para que dichos locales operen más allá de las horas de la mañana, sin implementar las medidas de seguridad necesarias, como detectores de metal y botones de pánico.
Durante los primeros tres meses del año, la Secretaría de Seguridad del Ayuntamiento otorgó un total de 46 extenciones de horario, principalmente a antros en Mexicali, permitiéndoles cerrar más tarde. De particular interés es el bar Donde, donde se vio por última vez con vida a la joven Paola Bañuelos, presumiblemente víctima de un delito sin resolver.
El centro nocturno Kafuu está bajo investigación relacionada con el caso de Paola Bañuelos. Este establecimiento pertenece a Juan Manuel Lameiro, quien está vinculado a la actual gobernadora y su esposo, Carlos Torres Torres. Este bar ha sido objeto de críticas por sus conexiones con ex panistas y su proximidad al bar Shots, donde se reportaron múltiples desapariciones.
En la lista de bares que han solicitado extensiones de horario se encuentran lugares como Republik y El Nido, que han hecho peticiones similares. Otros bares como Frontera, Izakaya y Cotorro también han buscado aumentar sus horas de operación, aumentando aún más la preocupación entre los ciudadanos por la seguridad en estos locales.
