Las sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos se centran en varios grupos criminales relacionados con el narcotráfico.
El Departamento de Estado de EE. UU. menciona específicamente a los líderes del cartel conocido como “La Nueva Familia Michoacana”.

Estos individuos son considerados jefes del cartel mencionando; una organización criminal con vínculos en el tráfico de drogas en el país.
El programa de recompensas del gobierno estadounidense busca capturar a los líderes de estos grupos delictivos, facilitando así la acción gubernamental contra el narcotráfico.
Según informes del Departamento de Estado, la organización criminal tiene presencia en varias regiones, como Michoacán y Guerrero, áreas con un alto índice de violencia asociada al narcotráfico.

Este grupo ha sido responsable de numerosos enfrentamientos entre distintas facciones criminales, que luchan por el control de las rutas de tráfico.
Las acusaciones incluyen la fabricación y distribución de sustancias controladas como heroína, metanfetamina, cocaína y fentanilo.
Adicionalmente, se ha señalado que el cartel emplea violencia tanto contra sus rivales como contra las fuerzas de seguridad, utilizando diversas tácticas, incluyendo drones.