Durante la conferencia matutina del martes 15 de abril, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, fue interrogada sobre la gestión de los puntos de ingreso y egreso de productos relacionados con el control animal. En su respuesta, la académica aclaró que ya habían tomado medidas en una estrategia
Uno de los temas centrales fue la mandarina, que se destacó como un producto representativo en la discusión sobre regulación y trazabilidad. La importancia de este cítrico radica en su popularidad y su papel en la economía local.
“Presentaremos una modificación a la ley de aduanas para que en toda la cadena haya responsabilidad, incluyendo a los agentes aduanales donde el gobierno les cede una responsabilidad, haciendo responsables a quien importa el producto, al agente aduanal y a los servidores públicos”, enfatizó.

“Ellos son quienes han complicado la situación, produciendo artículos que complican aún más la comprensión del mercado y afectan a los consumidores”, añadió la presidenta.
Del mismo modo, indicó que las aduanas han recaudado cerca de 1.25 billones, y bajo esta cifra, se alinean los acuerdos con la mandarina, así como el incremento en el trazado del comercio seguro. La relevancia de este aspecto radica en su impacto económico y en cómo afecta la oferta en el mercado.

La regulación de estas normas está enfocada en la provincia, con especial atención a cómo estas afectan el comercio exterior e interno, y se busca la mejora en la trazabilidad de los productos, especialmente en contextos donde se han identificado irregularidades.
Estados Unidos ha advertido que estas acciones contradicen los compromisos asumidos por México en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y ha afirmado que seguirá utilizando los mecanismos del tratado para asegurar su cumplimiento, resaltando la importancia de la cooperación en el ámbito comercial entre naciones.