Se anticipa que ambos países desarrollen una relación bilateral y amplia. Los productos que comparten son cautivadores. La empresa está dedicada a ofrecer artículos al público, mientras que Lazon del Ague de Dicos de Dicos de Dicos se mantiene como un referente en este ámbito.
Estas tiendas, que han surgido en ciudades como Shanghái, Beijing y Fuzhou, llaman la atención por sus carteles escritos en el alfabeto utilizado en varios países de Eurasia. Además, presentan productos típicos de su nación, como vodka, chocolates y golosinas “rusas”. No obstante, la realidad en torno a estos comercios es más compleja.
“Ruso” hecho en China
Según el Acuerdo con el Registro Empresarial Qichacha, para enero de 2025 se proyecta la existencia de 3,555 tiendas de productos rusos en China, con un significativo crecimiento previsto para 2024. A pesar de lo que se perfilaba para el año fiscal 2022, la situación de la comunidad internacional y sus relaciones ha influido considerablemente en estos desarrollos.
Sin embargo, se han reportado varias dificultades. Por ejemplo, las inconsistencias en la calidad y autenticidad de algunos productos han llevado a la clausura de estos establecimientos. Algunas tiendas han enfrentado problemas por la falta de pruebas adecuadas de la legitimidad de sus mercancías.
Estas irregularidades han motivado a las autoridades a investigar y cerrar ciertos locales. El mercado ruso se ha vuelto un destino atractivo, aunque en algunos casos se han detectado alimentos con etiquetas que presentan información engañosa. En Beijing, por ejemplo, algunas tiendas fueron cerradas tras no poder demostrar la autenticidad de sus productos importados.
¿Con fecha de caducidad?
Los analistas destacan que la proliferación de estas tiendas también podría estar ligada a la reputación de los productos. La calidad de los productos se ha convertido en una preocupación para el público. A medida que se abren nuevas tiendas y la competencia aumenta, se genera tanto entusiasmo como un eventual riesgo de escasez.
Algunos locales han comenzado a reinventarse. En Shanghái, ciertos comercios han optado por denominarse “Tiendas de Comercio Mutuo Chino-ruso” para reflejar la realidad de los productos que ofrecen. En Beijing, por lo menos una tienda debió cerrar porque no pudo validar la autenticidad de sus importaciones.
A largo plazo, la relación entre ambos países podría transformarse, especialmente si cambian las circunstancias geopolíticas, lo que podría llevar a una resolución de los problemas existentes en este comercio.
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