Desde el 7 de abril hasta el 14 del mismo mes, se llevará a cabo un boicot nacional contra Walmart. Esta iniciativa ha sido impulsada por ciudadanos preocupados por la influencia de las grandes corporaciones en el país.
Según Newsweek, esta acción busca denunciar el impacto desproporcionado de esas corporaciones y exigir que contribuyan más a la carga fiscal del país.
El boicot no solo afecta a las tiendas físicas de Walmart, sino también a sus otros servicios, como farmacias y suscripciones como Walmart+. La campaña ha sido promovida por John Schwartz, fundador de la organización Unión y Credda, creada en febrero de este año.
Schwartz ha utilizado plataformas como TikTok para difundir el mensaje y ha acumulado alrededor de 350,000 seguidores. En sus videos, ha enfatizado: “Si están, no compren, no hagan pedidos, nada”.
Conforme a Newsweek, el movimiento que lidera Schwartz centra su atención en lo que considera un desequilibrio en la carga fiscal. Según él, Walmart y otras grandes corporaciones no están pagando lo que deben en impuestos, lo que afecta a los ciudadanos estadounidenses.
La misión de Schwartz es clara: “Queremos que empiecen a pagar su parte de impuestos para que el pueblo estadounidense se beneficie”. El boicot contra Walmart no es un caso aislado, ya que se inscribe en una serie de protestas más amplias que abordan temas de justicia fiscal y el poder empresarial.
A pesar de las críticas, Walmart defiende sus prácticas. En un comunicado enviado a Newsweek, la compañía afirmó: “Como uno de los mayores contribuyentes corporativos del país, solo pagamos nuestra parte”. Además, resaltaron que el año pasado donaron más de 1,700 millones de dólares en contribuciones, apoyando diversas causas.
El mensaje de Schwartz también se extiende más allá de Walmart; ha instado a los consumidores a reducir sus gastos y priorizar compras locales. “Este movimiento no va en contra de las personas”, ha puntualizado.