El miércoles pasado, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la implementación de aranceles recíprocos, una medida que, según él, busca promover “la equidad” en el comercio internacional.
México y Canadá lograron evitar tasas arancelarias más altas, debido a que ambos países signaron un acuerdo en relación con las exportaciones de acero y otros productos en la industria automotriz.
La mayoría de las naciones enfrentarán un arancel del 10% a partir del 5 de abril, mientras que otros países tendrán tarifas aún más elevadas que entrarán en vigor el 9 de abril próximo.
De acuerdo con el anuncio, los bienes que cumplan con las regulaciones del tratado mantendrán acceso sin aranceles, mientras que aquellos que no se adecuen a las normativas tributarias enfrentarán sanciones.

Carlos Loret de Mola comentó el miércoles por la noche este asunto en su programa de noticias en Latinus. El comunicador afirmó que “la ilusión duró muy poco”. Recordó que Trump estaba en el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca cuando realizó el anuncio, que era esperado desde hace días.
Loret indicó que, aunque se pronunció pero no se anunciaron los aranceles, el presidente argumentó que hay un desespero global y, en consecuencia, no se puede dar la espalda a estos problemas económicos.
El periodista mencionó que el documento que la Casa Blanca hizo circular contenía información detallada sobre los aranceles propuestos, lo cual desnudaba el episodio político y la lógica económica involucrada país por país.
Por último, Loret de Mola subrayó que los aranceles aplicados de 25% a productos como el acero y el aluminio se mantienen, así como las tarifas sobre automóviles que afectan directamente a la economía mexicana, dado que cerca del 20% de las exportaciones de México son de este sector.