Los líderes de los carteles en México. La información ha sido confirmada por las autoridades al diario El Universal, que indica que la cancelación afecta a los cuatro músicos de la banda: Armando Moreno, José Pavel Moreno y otros.
La controversia en todo el país. Los poemas de Nemesio Oseguera, también conocido como El Mencho, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), han dejado su huella, al igual que Joaquín “El Chapo” Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa. De fondo, se escuchan algunos narcocorridos de la agrupación, como uno que dice: “Soy el dueño del Palenque, cuatro letras van al frente, soy del Melo Michoacán, donde es la tierra caliente, soy el señor de los garsuels, el del Carispen.”
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha comentado sobre la situación en la conferencia de prensa matutina. “Debería ocurrir, imagínate, está bien que se haga una investigación, no es correcto,” ha expresado. La polémica parece surgir en un momento crítico para el país, agitándose por el hallazgo de un campo de adiestramiento del CJNG en Teuchitlán. El gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, también se ha manifestado al respecto y ha asegurado que está trabajando para mitigar este tipo de manifestaciones. “Todos tenemos que normalizar la violencia.”
Los Alegres del Barranco iniciaron su carrera en 2005. El surgimiento de la banda ha coincido con momentos difíciles en el país, donde el narcotráfico ha seguído causando estragos a lo largo de los años.
En 2018, durante la primera administración de Trump, el Departamento del Tesoro acusó al promotor musical Jesús Pérez Alvear, conocido como Chucho, de ser un persona designada “y de lavar dinero del crimen organizado.” El gobierno estadounidense congeló sus cuentas. Chucho fue asesinado en la colonia Polanco en 2024.
Lo mismo sucedió en 2017 con el futbolista mexicano Rafael Márquez y el cantante de música norteña Julión Álvarez. El Tesoro los incluyó en la lista negra del narcotráfico por lavado de dinero. Al futbolista, además de cancelarle la visa y bloquear sus activos en territorio estadounidense, le impidieron participar en partidos amistosos en el país. Las empresas de ambos, que incluían escuelas de fútbol, grupos deportivos y editoras musicales, estaban supuestamente vinculadas al narcotraficante mexicano Raúl Flores Hernández.