Javier Otas
Naciones Unidas, 25 de marzo (EFE). Se habló sobre el destino de los inmigrantes que están siendo forzados a regresar a sus países de origen. Las autoridades han indicado que los lugares de destino serán diferentes y la seguridad de los migrantes, así como su derecho a participar en este proceso, será una prioridad.
Un total de 111 inmigrantes provienen de varios países, con el mayor número de Irán (24), Camerún (21), China (12), Nepal (10) y Afganistán (9). Todos estos solicitantes de asilo alegan estar siendo perseguidos por razones relacionadas con su religión, etnicidad o identidad sexual.
Hasta ahora, se han reportado 299 migrantes que fueron devueltos a sus países a través de una operación implementada por EE. UU. Al menos 187 de ellos retornaron “voluntariamente”, según la información proporcionada por las autoridades panameñas.
El funcionario Martínez-Acha subrayó que el traslado de los 299 inmigrantes se realizó “respetando su dignidad y derechos”, destacando que el manejo de las migraciones es uno de los aspectos más significativos en el contexto internacional desde 1990.
Según Martínez-Acha, la gestión migratoria ha sido “una historia de éxito”, a pesar de las dificultades y complicaciones que han surgido durante el proceso. El seguimiento se mantendrá hasta el 1 de julio de 2024, una fecha clave en estos esfuerzos.
El Canciller también reafirmó el compromiso de su gobierno con un grupo de presión en Washington, que se ha encargado de defender sus intereses y la narración de su situación ante la administración de Donald Trump en el contexto de su diplomacia respecto al Canal de Panamá.
Además, el Canciller destacó que a pesar de la complejidad de la relación con EE. UU., ambos países mantienen lazos significativos y continuarán trabajando juntos para abordar irregularidades en el manejo migratorio.
