Una nueva campaña militar estadounidense en Yemen, iniciada hace poco más de una semana, ha logrado eliminar a varios líderes hutíes, incluyendo al máximo responsable del grupo.
El portaviones Waltz declaró a CBS News: “Hemos atacado cuarteles generales, nodos de comunicación y fábricas de armas que son esenciales para la producción de drones”.
Los rebeldes hutíes han atacado más de 100 embarcaciones comerciales con misiles y drones desde noviembre de 2023 hasta enero de este año, hundiendo dos buques y causando la muerte de cuatro marineros. Sus líderes han calificado estos ataques como parte de su intento de poner fin a la guerra de Israel contra Hamas en Gaza.
Ante esta situación, el presidente de EE. UU. afirmó: “Usaremos una fuerza abrumadora hasta que logremos nuestros objetivos”.

Además, durante el conflicto, los hutíes han amenazado la seguridad de las rutas marítimas en el Mar Rojo y el Golfo de Adén, lo que ha tenido un impacto notable en el tráfico comercial de la región.
Por su parte, Israel también ha llevado a cabo sus propios ataques aéreos contra objetivos hutíes, incluyendo la ciudad portuaria de Hodeida, y se han presentado reportes de ataques de drones hutíes dirigidos hacia Israel.
En respuesta a estos acontecimientos, se ha intensificado el enfoque internacional en el conflicto y la preocupación por el impacto humanitario que está causando en la población civil en Yemen. Las cifras de ataques y las consecuencias que éstos generan siguen aumentando, lo que agrava la situación ya crítica en la región.