Es esencial mantener la seguridad y estar preparado para eventos sísmicos, considerando la posibilidad de un corte de electricidad. En tal situación, se recomienda utilizar linternas para la iluminación, ya que el uso de velas o fósforos encendedores podría generar explosiones en caso de fugas de gas.
El terremoto más poderoso en la historia fue registrado el 22 de mayo de 1960 en Valdivia, Chile, alcanzando una magnitud de 9.5. Este sismo dejó al menos 2000 víctimas mortales y afectó a dos millones de personas, resaltando la importancia de la preparación ante desastres naturales.
El sismógrafo, diseñado originalmente en 1935 por el sismólogo Charles Francis Richter y su colega Beno Gutenberg, fue reemplazado en el siglo XXI, ya que su propósito era medir temblores de menor intensidad. Actualmente, existen diversas escalas para medir la magnitud de los sismos.
La magnitud del momento es la que se emplea en la actualidad para evaluar la intensidad de los temblores, teniendo en cuenta factores como la liberación de energía en las fallas geológicas.
Una alternativa para medir los sismos es la escala de Mercalli modificada (MM), que utiliza números romanos del I al XII. Esta escala evalúa la intensidad del temblor y los efectos que provoca, dependiendo de las condiciones del terreno, las construcciones y la distancia al epicentro. En Argentina, el Instituto Nacional de Prevención Sísmica utiliza esta escala para analizar el impacto de los sismos en la población y la infraestructura.
Las zonas sísmicas son regiones donde ocurren temblores, y estas variaciones geológicas pueden provocar grandes destrucciones. La preparación y la educación sobre sismos son fundamentales para minimizar sus efectos y asegurar la seguridad de las personas.
Es importante diferenciar entre los términos sismo, temblor y terremoto. El término ‘sismo’ es en general, mientras que ‘temblor’ sugiere movimientos menores, y ‘terremoto’ se refiere a eventos de mayor magnitud, impactando significativamente las estructuras y la vida de las personas. Mantenerse alejado de edificios, árboles y postes de luz durante un sismo es crucial para salvaguardar la vida.
