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La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció que se esperará hasta el 2 de abril para decidir si se implementan aranceles recíprocos a las importaciones de acero y aluminio.
La situación no solo depende de la necesidad de impuestos arancelarios, sino que también son relevantes los tratados y acuerdos comerciales existentes.
“Esperamos el 2 de abril, y a partir de esa fecha definiremos si se aplican o no estos aranceles recíprocos”, afirmó Sheinbaum.
En el contexto de la situación comercial, se mencionó que existe una desventaja para México respecto a los aranceles recíprocos que se discutirán el 2 de abril.
Sin embargo, Sheinbaum mencionó la semana pasada que México podría quedar exento de estos aranceles recíprocos, debido a que se busca “reciprocidad” en el comercio.
La Presidenta agregó que el martes se reunieron el Secretario de Economía de México, Marcelo Ebrard, y el Secretario de Comercio de EE. UU., Howard Lutnick, para continuar las negociaciones, enfatizando que seguirán trabajando con las partes interesadas para tomar una decisión definitiva el 2 de abril.
Marcelo Ebrard también señaló que, si el gobierno de Sheinbaum decide imponer aranceles a las importaciones de acero, esto afectaría a varias industrias mexicanas, especialmente a la automotriz, y podría incrementar los costos de producción.
La industria automotriz y de autopartes se vería particularmente afectada, ya que el aumento de costos podría afectar la competitividad de la región. Ebrard advirtió que imponer aranceles podría dificultar proyectos de construcción, afectando también sectores como el de electrodomésticos y la manufactura en general.
