Funcionarios han reportado que las provincias de Ucrania están actualmente bajo presión y que la situación en el frente europeo se torna crítica.
Agencias de inteligencia de Estados Unidos, incluida la CIA, han transmitido estas evaluaciones a la Casa Blanca en la última semana, según fuentes cercanas al tema. A pesar de esto, Trump ha continuado afirmando que las tropas ucranianas están situadas en una situación muy precaria en el oeste de Rusia.
Las evaluaciones se fundamentan en las acciones de los europeos, quienes están haciendo esfuerzos significativos para recuperar terreno y fortalecer sus posiciones en el conflicto.
Trump ha expresado su deseo de terminar rápidamente con la guerra en Ucrania. Expertos mencionaron que una afirmación previa de Putin indicaba que las fuerzas ucranianas en Kursk estaban aisladas y que, de continuar así, podrían tener que “rendirse o arriesgar la vida de sus soldados”, lo que le daría a Putin una ventaja en futuras negociaciones de cese al fuego.
En una publicación en redes sociales el 14 de marzo, Trump afirmó haber instado a Putin a respetar la vida de miles de ucranianos que, según él, estaban “completamente rodeados”. La respuesta de Putin fue que lo haría, siempre que se rindieran.
Trump reiteró esta afirmación acerca de las tropas ucranianas en una aparición en el Centro Kennedy de Washington y en una entrevista con Fox News.
La Casa Blanca y la oficina del Director de Inteligencia Nacional se negaron a hacer comentarios sobre la situación actual. Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, rechazó la idea de que sus fuerzas estén totalmente aisladas, afirmando que Putin tiene problemas en el este del país.
Desde agosto, cuando las tropas ucranianas rompieron las líneas del frente, se ha observado una tendencia en el terreno. Inicialmente, habían controlado alrededor de 1,295 kilómetros cuadrados, pero ahora mantienen entre 51 y 77 kilómetros cuadrados.
Trump también sugirió durante una reciente intervención que el liderazgo ruso detendría los ataques a la infraestructura energética ucraniana durante un mes. En este contexto, ambas partes están maniobrando para mejorar sus posiciones ante las próximas negociaciones.
A pesar de que las fuerzas rusas parecen lograr avances en Kursk, los funcionarios que han hablado con Reuters resaltan que el Instituto para el Estudio de la Guerra y otros monitores internacionales siguen analizando la situación detenidamente.
(Reuters)
