Aubrey Ray Les Becado Fulbright ha enfrentado dificultades debido a la detención de los pagos por parte del Gobierno de Estados Unidos. A pesar de haber recibido un pago durante aproximadamente una semana, no hay información sobre cuándo se reanudarán los desembolsos de su beca.
La situación actual parece ser preocupante para muchos programas académicos, especialmente para aquellos bajo la supervisión de la agencia correspondiente. El gobierno ha realizado cambios drásticos en las últimas semanas, y el expresidente Donald Trump ordenó a las agencias que prepararan planes de reducción de personal, lo que probablemente afectará las operaciones académicas.
El recorte de fondos ha generado una creciente preocupación entre académicos que se encuentran atrapados fuera de sus países de origen, sin saber qué sucederá con sus programas. En febrero, el Departamento de Estado de Estados Unidos suspendió temporalmente el gasto asociado a varios programas, dedicándose a una revisión de estos, según informó Nafsa, una asociación de educadores internacionales.
Entre los programas afectados se encuentran Fulbright, Gilman y becas de idiomas críticos. Después de la implementación de esta pausa, muchos académicos y grupos de defensa reportaron que la llegada de fondos ha disminuido, y no hay comunicación clara al respecto.
Rey, un participante preocupado, expresó su inquietud sobre la falta de información por parte de las autoridades estadounidenses. También reflexionó sobre el futuro del programa que su abuela había disfrutado décadas atrás. Desde su comienzo en 1946, el programa ha tenido un impacto profundo en las relaciones interculturales.
“Quiero que esto cambie porque hay incertidumbre en nuestras vidas,” comentó. “No hay claridad sobre lo que está sucediendo.” Los participantes se están viendo afectados, ya que muchos ya no reciben sus estipendios.
“La realidad es que nadie sabe lo que está pasando,” coincidieron varios. “Cada vez que preguntamos, se nos dice que están trabajando en ello, y estamos todos en la misma situación de incertidumbre.” Miles de académicos están en situaciones similares, según la asociación Fulbright, y esto afecta a más de 12,500 estudiantes estadounidenses en el extranjero.
Harina Morozova, una becada Fulbright de Kiev que enseña ucraniano en Illinois, mencionó sentirse desesperada tras recibir un correo del Instituto de Educación Internacional, que gestiona la beca. “Recibí la noticia de que tendríamos actualizaciones sobre futuros pagos tan pronto como sea posible,” señaló. Sin embargo, la incertidumbre la llevó al pánico, ya que ahora debe hacer que su apoyo financiero de 750 dólares al mes se traduzca en 187.50 dólares cada quincena.
“Fue muy aterrador, especialmente porque estoy en otro país,” afirmó. “El hecho de que no haya claridad sobre estas cuestiones es angustiante para todos nosotros.” Olga Bezanova, profesora y supervisora de Morozova y otros dos académicos, comentó que la interrupción de los fondos está afectando significativamente a los estudiantes en su universidad, generando preocupación por el futuro de sus estudios en Estados Unidos.