Washington – El presidente Donald Trump informó el jueves que se implementará un arancel del 25% sobre la mayoría de los productos provenientes de México y Argentina, así como de Canadá, durante un mes, en un contexto de crecientes preocupaciones acerca de las consecuencias de una posible guerra comercial más amplia.
La Casa Blanca ha señalado que estas medidas buscan detener el contrabando de fentanilo, aunque los aranceles han sido una herramienta comercial en Norteamérica durante décadas. Los planes están fundamentados en una serie de descensos en los índices comerciales del país, lo que ha generado alarma entre diversos sectores.
El mandatario estadounidense manifestó que “la mayoría de los aranceles entrarán en vigor el 2 de abril” y añadió que “también tenemos algunos con montos relativamente menores, aunque la cifra sigue siendo considerable para México y Canadá.” Trump mencionó que había contemplado una extensión por un mes más sobre los aranceles del 25% aplicables a los automóviles.
Según las órdenes que firmó Trump, las importaciones desde México estarán afectadas por un 25% durante un mes, con México y Canadá entre los países más impactados. El 62% de las importaciones provenientes de México, que no hayan sido afectadas por acuerdos comerciales, también estarán gravadas, como resultado de las decisiones tomadas por Trump, quien destacó que esto forma parte de su política económica.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, tenía previsto presentar medidas en respuesta el domingo, pero el anuncio de Trump se centró en el contrabando de drogas. “Hice esto como un gesto de buena voluntad, y en respeto a la presidenta Sheinbaum,” declaró Trump en Truth Social, subrayando que “nuestra relación ha sido muy positiva, y estamos trabajando arduamente juntos en la frontera.”
Las acciones de Trump han tenido un efecto provisional sobre las relaciones con Canadá, especialmente tras su anuncio de aranceles sobre productos que tienen un total estimado de 21 mil millones de dólares canadienses (aproximadamente 16 mil millones de dólares estadounidenses). En respuesta, Ottawa había suspendido la segunda ronda de aranceles, que alcanzaba otros 87 mil millones de dólares canadienses.
Las amenazas intermitentes de aranceles han ocasionado inestabilidad en los mercados financieros y han disminuido la confianza empresarial en un entorno lleno de incertidumbre. Los principales mercados bursátiles en Estados Unidos se han visto afectados, llegando a mínimos históricos tras los reciente comentarios de Trump. El S&P 500 se sitúa actualmente muy por debajo de los niveles anteriores a las amenazas de guerra comercial.
