En su estrategia de política comercial, el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está considerando un nuevo giro después de generar movimientos tumultuosos en los mercados financieros. La situación en el país se agrava, y es evidente que necesita abordar la economía y la percepción pública.
“Tanto los mexicanos como los canadienses han estado en contacto conmigo por teléfono todos los días, mostrando su disposición a mejorar las cosas”, indicó en Fox Business. “Por lo tanto, creo que se alcanzará un acuerdo; no se tratará de una pausa, sino que se buscará un punto medio y probablemente lo anunciaremos mañana”, agregó.
La opinión pública está cada vez más atenta a los productos provenientes de Canadá y México, y existe una creciente expectativa de que se encuentre un término “intermedio”, con Trump buscando alternativas sin comprometer sus posiciones.
La economía, el comercio y la industria están en la mira, considerando que las proyecciones de inflación han aumentado. La bolsa ha experimentado fluctuaciones drásticas, especialmente debido a los rumores que rodean la política comercial, justo antes del 5 de noviembre, fecha clave para muchos inversores.
La gestión de los aranceles hacia los países vecinos ha sido caótica. Las medidas de liberalización han quedado en entredicho, y a pesar de la intervención de tratados como el T-MEC, el comercio ha sufrido estragos. Después de ganar las elecciones, Trump prometió imponer aranceles del 25% a todos los productos mexicanos y canadienses, además de abordar el tráfico de fentanilo y la inmigración.
A medida que la economía se tambalea, Trump tomó decisiones relacionadas con los aranceles, provocando otra sacudida en los mercados. Las conversaciones con la jefa de gobierno de México, Claudia Sheinbaum, y el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, lo llevaron a modificar algunas de sus condiciones, aplazando la aplicación de aranceles hasta marzo.
Tras observar la reacción de los mercados y posiblemente darse cuenta de que el país enfrenta una crisis económica debido a su enfoque errático, ahora podría estar abierto a renegociar. Bajo su administración, se establecieron condiciones que favorecen a aquellos que operan dentro del sistema, planteando que “si cumples con estas reglas, te verás beneficiado”, para quienes no lo hagan, las tarifas siguen siendo una carga considerable.