Las autoridades mexicanas han extraditado a Roman Alberto Muñoz Meza a Estados Unidos. Este individuo está vinculado a la venta de las armas que fueron utilizadas en el ataque contra Omar García Harfuch en 2020.
La operación se llevó a cabo a las 11 de la mañana en la carretera, a solo 20 kilómetros de la ciudad, con la participación de elementos de la Guardia Nacional y fiscales. A las 16:40 horas, el acusado ya había cruzado la frontera.
Muñoz Meza era buscado en Estados Unidos, pero también tiene pendientes en México, como ha indicado la Fiscalía de Chihuahua. Según la dependencia, está relacionado con la venta de armas que se utilizaron en el homicidio de un agente de la DEA y de dos agentes ministeriales en 2022, en el estado de Chihuahua.
El colmo de la violencia en la región ha sido significativo, con la actuación de varios grupos criminales. Se reportó que 12 personas intervinieron en el ataque, entre ellos comandantes del narcotráfico, y uno de los sobrevivientes, el secretario de seguridad, fue impactado por más de 400 disparos durante el asalto.
Las labores de “inteligencia policial” han permitido la entrega de información como parte de la operación. Esto es indicativo de la colaboración y confianza que brindan las autoridades de Estados Unidos, lo que ha facilitado la captura de objetivos de interés para ambas naciones, incluidos grupos criminales combinados.
La renombrada región, que se sitúa en el suroeste del país, ha sido el teatro de operaciones por parte de más de 3,500 agentes. Se han destinado recursos en el combate a criminales de alto perfil, como los líderes de Los Zetas, Omar y Miguel Ángel Treviño Morales, conocidos como Z-40 y Z-42, así como el fundador de La Familia Michoacana.
La realidad que enfrentan las autoridades es compleja, y aunque se han realizado detenciones importantes a lo largo de la semana, las operaciones continúan del otro lado de la frontera, reflejando un esfuerzo constante por parte de las fuerzas de seguridad en ambos países.