Washington – El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado una exención de un mes para los aranceles sobre la importación de automóviles y autopartes provenientes de Canadá y México.
El anuncio se realizó tras una reunión que Trump mantuvo con los principales ejecutivos de las tres grandes automotrices: Ford, General Motors y Stellantis, el miércoles. “Hablamos con los tres grandes fabricantes de automóviles”, afirmó Trump en un comunicado leído por su portavoz. “Vamos a otorgar una exención de un mes a cualquier vehículo que ingrese bajo el T-MEC”, haciendo referencia al tratado de comercio de América del Norte que renegoció durante su primer mandato.
Antes de este anuncio, el Secretario de Comercio mencionó que se estaban considerando impuestos del 25% a los automóviles provenientes de Canadá y México, un cambio potencialmente drástico desde la década de 1980. El secretario también declaró que Trump podría revertir sus decisiones sobre los aranceles en el sector automotriz.
“Habrá aranceles, seamos claros”, advirtió Lutnick. “Estamos en un período en el que el mundo está volviendo a regularse.” La revisión de las políticas arancelarias tiene como objetivo un enfoque más “recíproco” y plantea la posibilidad de subsidios en el sector automotriz.
La situación se complica además con las reacciones de Canadá y México. El Ministro de Finanzas canadiense, Dominic Leblanc, expresó que su nación no dudaría en implementar aranceles si se llevan a cabo nuevas medidas por parte de Estados Unidos. “Ellos quieren que eliminemos los aranceles”, aseveró Leblanc a la Canadian Broadcasting Corporation.
El martes, Trump había impuesto aranceles del 25% a las importaciones de acero, mientras que se aplicaron tasas del 10% a los productos provenientes de China, llevándolos así al 20%. Estas acciones generaron respuestas inmediatas por parte de Canadá y China, con México anunciando que revelaría su plan de respuesta en domingo. Las preocupaciones económicas llevaron a los mercados a perder todas las ganancias tras la victoria de Trump en las elecciones previas.
Trump intenta minimizar el posible daño económico, refiriéndose a la situación como “una pequeña perturbación”. “Podría haber un breve período de ajuste”, sugirió, instando a la paciencia por parte de los ciudadanos. El Primer Ministro canadiense, Justin Trudeau, interpretó los movimientos de Trump como un ataque a la amistad entre ambas naciones.
Trudeau afirmó el martes que impondría aranceles sobre productos estadounidenses por un valor superior a los 100,000 millones de dólares. “Hoy, Estados Unidos ha declarado una guerra comercial contra Canadá, su aliado más cercano”, declaró Trudeau. “Al mismo tiempo, están buscando trabajar positivamente con Rusia y apaciguar a Vladimir Putin, un dictador mentiroso y asesino. Intenta dar sentido a eso”, concluyó Trudeau.
Mientras tanto, México está preparando su respuesta polémica para el fin de semana, mientras que Beijing reaccionó anunciando aranceles del 15% sobre diversas importaciones estadounidenses.
