El 1 de marzo marcó el inicio del mes sagrado en el Islam, que implica el ayuno, la oración y actos de caridad. Mustafa Cenap Aydin, sociólogo de las religiones en el Instituto Tíber – Centro para el Diálogo, destaca la coincidencia de este período con la Cuaresma.
Este tiempo, que abarca tanto el Ramadán como la Cuaresma, es un momento de profunda reflexión sobre temas en común tanto para musulmanes como para cristianos. Ambos grupos comparten convenciones que promueven la introspección y la conexión espiritual. Aydin subraya que en el año 2025, el mes sagrado para los musulmanes comenzará solo cinco días antes de la Cuaresma cristiana, que empezará el 5 de marzo. Esta coincidencia, explica, brinda la oportunidad de comprensión mutua entre ambas comunidades.
Ramadán y Cuaresma
Para cristianos y musulmanes, el ayuno no solo se trata de abstenerse de alimentos, sino que también se comprende como un periodo para profundizar en la espiritualidad. Aydin afirma que estos tiempos son propicios para la reflexión y el fortalecimiento de la fe. Este próximo miércoles, 5 de marzo, representará para los cristianos el Miércoles de Ceniza, que da inicio a 40 días de preparación hacia la Pascua. Aydin señala que tanto los 30 días del Ramadán como los 40 días de la Cuaresma ofrecen a ambos grupos la oportunidad de renovarse espiritualmente y de acercarse unos a otros.
El 60 Aniversario de Nostra Aetate
La celebración del 60 aniversario de la declaración Nostra Aetate, promulgada por el Papa Pablo VI el 8 de octubre de 1965, es otro motivo de reflexión para Aydin. Resalta que los musulmanes, especialmente a través de la oración, la limosna y el ayuno, están llamados a contribuir a la paz y la reconciliación. Aydin enfatiza la importancia de la oración, entendida como un acto de invocación para pedir por la paz y la unidad, destacando que esta no se puede lograr sin la voluntad divina.
Oración por el Papa Francisco
Aydin concluye expresando su deseo de que en este tiempo sagrado se eleve una oración especial por el Santo Padre. “Intentaremos estar cerca de él, quien es un hombre de oración y un pilar en la vida espiritual”, comenta. Como musulmanes, durante el mes de Ramadán, también estaremos unidos en nuestra oración, recordando la importancia de la solidaridad y la empatía hacia el prójimo.