Durante la reunión en Washington, se acordaron medidas para combatir el crimen organizado en ambas naciones. Las autoridades de México y Estados Unidos establecieron un plan conjunto para implementar acciones en las próximas semanas.
El gobierno mexicano anunció una serie de iniciativas coordinadas entre ambos países, enfocadas en fortalecer la seguridad a lo largo de la frontera y en la lucha contra el tráfico de fentanilo y armas de fuego ilegales.
La delegación mexicana estuvo liderada por el Secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, y el Fiscal General de la República.

Los funcionarios mexicanos presentaron a Marco Rubio, Secretario de Estado, y Pam Bondi, Fiscal General de EE.UU., los avances en las incautaciones y detenciones relacionadas con el crimen organizado.
El Gobierno mexicano afirmó que los resultados en la lucha contra el narcotráfico se han logrado bajo principios de cooperación y respeto mutuo.
Además, se acordó que las autoridades de ambos países sostendrán reuniones periódicas del comité de trabajo en seguridad, buscando mantener una colaboración constante.

Mientras tanto, en Estados Unidos, la Fiscalía General de México y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana anunciaron la extradición de 29 líderes narcotraficantes que se encontraban en diversas cárceles del país, solicitados por las autoridades norteamericanas.
Entre los extraditados se encuentran figuras reconocidas como Rafael Caro Quintero y otros líderes del narco que han sido un foco de atención para las fuerzas de seguridad en ambos lados de la frontera.
Finalmente, el presidente Donald Trump, en una declaración desde la Casa Blanca, criticó a México por no realizar esfuerzos suficientes en la lucha contra el tráfico de fentanilo, indicando que se implementarán aranceles del 25% a partir del 4 de marzo.