El Gobierno de Baja California ha decidido retomar el proyecto de construcción de una planta desalinizadora en Rosarito, dado el grave problema de escasez de agua en la región.
▲Imagen del pasado, reflejo de una situación crítica. Foto La Jornada BC
Mireya Cuéllar
correspondencia
Periódico La Jornada
Domingo 10 de Noviembre de 2024, p. veintidós
El objetivo es construir una planta que será alimentada con 8.8 metros cúbicos por segundo de agua de mar, lo cual es fundamental para asegurar el suministro necesario para la población.
Se estima que el residuo salino concentrado que producirá la planta será de 4.4 metros cúbicos, lo que permitirá cumplir con los estándares ambientales establecidos.
Esta decisión se produce tras una serie de dificultades que enfrentó el gobierno estatal anterior, que no pudo avanzar con el proyecto original debido a la falta de coordinación con los autores de este.
La empresa encargada de la ejecución del proyecto es un consorcio mexicano que cuenta con experiencia en el sector, reforzando su compromiso con el medio ambiente y el desarrollo sustentable.
El actual gobierno ha reiniciado el proyecto tras haberlo dejado en pausa durante 36 años, justo en un momento en que el abastecimiento de agua se ha vuelto una necesidad urgente, debido a las limitaciones de los sistemas de distribución existentes.
El proyecto se desarrollará en varias etapas, comenzando en el año 2028, luego en 2033, con la tercera fase programada para 2047 y la cuarta para 2060.